Ministerio de Intercesión "La Llave a las Naciones"
"𝗟𝗔 𝗟𝗟𝗔𝗩𝗘 𝗔 𝗟𝗔𝗦 𝗡𝗔𝗖𝗜𝗢𝗡𝗘𝗦"
Bienvenidos a "La Llave a las Naciones", un ministerio de oración dedicado a unir corazones, rodillas y manos en intercesión por las naciones del mundo. En un mundo donde las fronteras se difuminan y las distancias se acortan, creemos en el poder transformador de la oración para marcar una diferencia en cada rincón del mundo.
Nuestro ministerio es más que un grupo de reuniones de oración. Es un llamado a levantarnos como guerreras(os) espirituales, comprometidos en presentar las necesidades de cada barca misionera y de las naciones ante el trono de Dios. Con un corazón sincero y dispuesto, nos unimos para compartir cargas, escuchar la voz divina y clamar por la paz, la justicia y la restauración que nuestro mundo anhela.
Creemos en la capacidad de la oración para abrir puertas, sanar heridas y cambiar destinos. Aquí, nos unimos como una comunidad diversa de creyentes, y ministerios guiados por el amor y el respeto mutuo, en búsqueda constante de la dirección de Dios para nuestras vidas y para las naciones que levantamos en oración.
En "La Llave a las Naciones", cada voz importa, cada oración cuenta y cada intercesión deja una huella duradera en el tejido espiritual de este mundo, y deja un impacto sobrenatural en cada misión realizada.
Cada barca misionera es un viaje de oración y servicio, mientras exploramos cómo nuestras oraciones pueden ser la llave que abre puertas a la transformación de las naciones.
Juntos, en unidad y con un corazón humilde, extendemos nuestras manos y corazones hacia las naciones, creyendo que nuestras oraciones son un vínculo entre el cielo y la tierra.
"Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que ates en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desates en la tierra será desatado en los cielos."- Mateo 16:19 (NVI)
Este versículo habla del poder que se nos ha dado Dios para influir en los asuntos terrenales, a través de la oración y la autoridad espiritual. El nombre del ministerio, "La Llave a las Naciones", refleja la idea de que nuestras oraciones pueden ser la llave que abre puertas en el reino espiritual, para traer transformación eterna y bendición a las naciones del mundo.
PROPÓSITO:
El propósito de "La Llave a las Naciones", es unir a individuos de diferentes partes del mundo, comprometidos con la oración y la intercesión por las almas en las naciones del mundo, por cada barca misionera (misión) que es asignado por Dios y la Gran Comisión. El ministerio busca promover la unidad espiritual y la intercesión efectiva a través de la oración.
"La llave a las naciones" es un ministerio de oración e intercesión que busca abrir puertas espirituales para llevar el evangelio a todas las naciones del mundo. Este ministerio se basa en la creencia de que la oración tiene el poder de romper barreras espirituales y preparar el camino para que la Palabra de Dios sea recibida en diferentes culturas y contextos.
Versículos clave:
Mateo 9:37-38 (RVR1960): "Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies." Este versículo muestra la importancia de la oración para que Dios envíe obreros a la mies, es decir, misioneros que lleven el evangelio a las naciones.
Mateo 28:19-20 (RVR1960): "Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén." Este pasaje es conocido como la Gran Comisión, donde Jesús envía a sus discípulos a hacer discípulos de todas las naciones. La oración es vital en este proceso, ya que es la llave que abre las puertas para que el mensaje del evangelio sea recibido en cada rincón del mundo.
Timoteo 2:1-4 (RVR1960): "Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad." Pablo exhorta a orar por todos los hombres, incluyendo a los gobernantes, para que podamos vivir en paz y para que todos puedan conocer la verdad y ser salvos.
El ministerio de oración e intercesión "La llave a las naciones" se basa en estos principios bíblicos, buscando ser instrumentos de Dios para abrir caminos para el evangelio mediante la oración ferviente y constante. Escrito por: Karla Ruiz